ESPACIO-CUERPO

Espacio-cuerpo fue una propuesta para ver desde el cuerpo, para quitarnos todo prejuicio sobre las obras y sobre el movimiento, para poder entender una exposición desde otro lugar.

En el grupo rendija, hicimos una visita guiada por la exposición Bajo la superficie (miedos, monstruos, sombras). No fue una visita guiada como las que se suelen hacer en otros museos, sino que el objetivo de la visita fue ver la exposición desde el cuerpo, entenderla desde otro punto de vista que no fuera el visual.

Se propusieron una serie de pautas a partir de propuestas espaciales en relación a las obras de la exposición. El tener la libertad de poder observar las obras desde distintos puntos y distancias en el espacio cambiaron no solo nuestro punto de vista sobre la exposición, sino que también modificaban nuestros cuerpos y su forma de moverse dependiendo del lugar en el espacio que ocupasen estos en relación a las piezas.

El resultado de esta investigación nos sorprendió mucho a todos ya que no pensábamos que nuestra visión sobre la exposición sería tan distinta a las veces que la habíamos visitado de manera convencional. Sentimos una mayor vinculación con las obras y con los compañeros ya que, al quitarnos todo juicio sobre lo que veíamos, y trabajar desde un lugar tan honesto como lo es el movimiento natural del cuerpo, hace que la exposición se entienda desde un lugar más puro. Se estableció una complicidad entre los miembros de rendija que facilitó mucho el desarrollo de la propuesta ya que nos apoyábamos unos a otros. Todo movimiento, todo pensamiento, toda acción, eran válidas. Considero que ninguno de nosotros teníamos la presión de hacerlo “bien” si no que la Sala de Bóvedas, donde se desarrolló la actividad, se convirtió en un espacio seguro y familiar donde los conceptos de “bien” y “mal” no existían y todo se trabajaba desde un impulso instintivo. No hay nada mal, nos movimos desde una naturalidad y un estado de conexión con uno mismo, con el grupo, y con la exposición.

Para nosotros fue una experiencia única que nos abrió los ojos y nos conectó con nuestro cuerpo ayudándonos a ver la exposición de una manera más pura y libre.